VIEJO SUEÑO
En tu cuerpo, mi cuerpo se transforma
el amor corre bravío, y tembloroso
es un río que baja enardecido,
cambiando nuestro mundo indiferente.
En tus labios los besos se adormecen
y nada la piel, en el susurro de tus ojos,
viajan los colores en la sangre más roja.
El sonido del silencio se hace visible
la ternura nos sumerge muy profundo,
humedeciendo los trinos de jolgorio.
Ha comenzado a latir un viejo sueño
y dos almas se retienen en dos cuerpos.
Mientras el silencio aflora escondido,
enhebrando tiempo, y nostalgias en un solo destino...
Alessandrini María del Rosario
Cuando los viejos sueños vuelven el fuego del amor se reaviva.
ResponderEliminarHermosos, poema e imagen.
Un abrazo.
Ambar
Hermosos sueños de amor y de alegre fantasía, Rosario.
ResponderEliminarBailemos un tango.
Un besazo mi niña.
Sí, es un bonito sueño, sin duda.
ResponderEliminarUn abrazo.
En estos tus versos se siente, se respira, se traspira amor por los cuatro costados de la nave. Hoy ha tocado manejar esa clave y es verdad que lo has hecho con ahinco y puesto en todo el poema tu empeño. Lo has conseguido.
ResponderEliminarUn abrazo. Franziska
Susurros que no se olvidaran...alwgrias de volver a sentir con todos los sentidos...vibrar.
ResponderEliminarBesos.