NACIENDO EN POESÍA
Aquella tarde primaveral te vi llegar con tu atuendo de hombre pasional, de mirarte me enamore, de tu andar, Tú figura robusta, tu caminar, nadie imagina cuanto deseo despertó. Tú presencia, tu estilo, tu estampa de macho. Sin razón, sin objeción, en tus brazos caí, en tu regazo como una flor me deshoje, en esos ojos negros me vi desfallecer, en tu piel canela ardiente me cobije. La pasión desbordo liberada, y fuimos ambos fósforos en la rivera de la música. El amor junto al deseo despertó, por un sendero apasionado nos llevo. A la hora de la luna se presento el des control, y entre las hojas de su luz, pintamos su belleza de ardiente fuego, naciendo en poesía.