EXTASIADA DE BELLEZA
Las imágenes se cruzan dislocadas
y aparecen entre azules brumas,
la emoción que retumba al corazón,
la pasión que se une en una canción.
Se instaló la armonía en esta mañana,
un ave canta en la copa del limonero,
junto a sus flores blancas un jilguero reza,
sonidos de la noche tormentosa en calma.
El silencio se pasea al borde del murmullo,
hay ojos resolviendo los colores que decantan,
intenso el sol cae sobre el roció de los pastos,
conmueven las imágenes de este bello cuadro.
No hay reposo para las bellas mariposas aladas
que revolotean dejando su imprenta entre rosas,
un ave esculpido entre malvones se inquieta…
Su pico se alarga hasta besar multicolores piedras,
dócil la mañana se eterniza extasiada de belleza.
MARÍA DEL ROSARIO ALESSANDRINI.
Es una estampa preciosa la que describes en tus versos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Y esa belleza se transformó en hermoso poema.
ResponderEliminarBesos.
Rosario, la mañana se extasía y nos llama...Me alegro por esa sensibilidad receptiva, que te eleva el alma y nos haces compartir a todos la belleza natural...Una preciosidad, amiga.
ResponderEliminarMi abrazo y mi cariño.
Sin ninguna duda una bella exposición en poesía de lo que puede recoger la mirada en ciertos momentos.
ResponderEliminarPrecioso María del Rosario.
UN placer mirar por tu mirada.
Un abrazo.
Maravilloso poema, que ilumina las pupilas por la frescura de la naturaleza tan bien descrita, hace que se lleve a la imaginación estos paisajes preciosos.
ResponderEliminarBesitos de luz
Qué decirte
ResponderEliminarsi todo eso,
es primavera...
Redescubrir cada dia
ResponderEliminarla belleza en nuestro alrededor
es grandeza de alma y corazón...
disfrútalo siempre.
los pájaros y los bichos parecen muy felices y bucólicos, pero en el fondo están muy ocupados y llenos de obligaciones, pobres :)
ResponderEliminarEs verdad que ante el panorama que describes la mañana debe quedarse extasiada de tanta belleza. Estupendo poema. Un abrazo. Franziska
ResponderEliminarEl silencio se pasea al borde del murmullo, palabras de amantes engalanan la noche misteriosa, y un rubor de luciérnaga ilumina la pasión dulce y delicada.
ResponderEliminarExquisito poema, María del Rosario.