Purpura tu boca
tu alma roja carmesí.
Tu vestido de plumas
tus enaguas de algodón
se entremezclan
con el estallido
de tu corazón…
En tu rugir de mil tormentas
está la esfera
que ilumina tu sur.
Tu espada de hierro candente
tus ojos pardos
y el mar a lo lejos
que se insinúa voraz…
Como ese grito audaz
que de tu garganta nace
y muere, cuando parte el sol…
mientras entra la noche.
Y se adueña de los sueños
borrando la realidad que creemos
batiendo palmas existencial…
Alessandrini María
del Rosario
Un hermoso cántico a la vida, María del Rosario.
ResponderEliminarArgentina eres y parte de mi sangre vive allá en esas tierras...Es primavera, aqui otoño pero, a un mismo son...
ResponderEliminarEl rugir de mil tormentas es la mejor señal de que estamos vivos y luchando.
ResponderEliminarAbrazos.
La existencia es eso
ResponderEliminarun latir intenso frente al mar...
muy bien hilvanado.
Somos olas en un universo a veces confuso y otras con luz. Intenso poema que nos hace pensar sonre el valor de nuestras vidas... Besito
ResponderEliminarRosario, impresionante tu poema, amiga...En el puedo ver un latido de pasión, de unidad con la naturaleza. La grandeza del mar en tu alma y esa lucha por seguir viviendo y sintiendo...Precioso.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo siempre.
M.Jesús
Hola Rosario, me ha encantado el poema, es emotivo, tierno y lúcido. Precioso de versad!
ResponderEliminarAbrazos.
Parece un hermoso homenaje para alguien.
ResponderEliminarBesos.