Cuantas horas y minutos pasan sin que pueda llegar a tu corazón, cuanta angustia y encono se factura, tanta nostalgia y olvido para qué. Donde se fue el candor de tu voz, tu andar de travieso mozo elegante, tu guante de cuero, tu lazo de piel, es que ya tus versos poéticos fugaron. No escribes mis canciones de amor, el papel se transformó es piedra, el oleaje de tu sentir es hierro candente, tu sueño se transformó en nube oscura. Donde estas que no te veo, ni te siento, el amanecer llega lentamente a mi sien, la noche dejo su huella en ella sin piedad, la luna roja se descubrió negándote. Yo aún te espero en mi cielo esmeralda, juntando jazmines para nuestra noche de pasión, soñando con el jardín donde nació el amor Este que me consume, me deleita aún sin ti. A-M-R
Un gran momento que no todos saben descubrir ni disfrutar.
ResponderEliminarYo creo en el amor, y en las Hadas.
Mi beso
Fuerte y sensual poema.
ResponderEliminarLa urgencia del amor.
Bien escrito.
Un abrazo.
Y es tan contagioso que el mismo polen reparte mas amor.
ResponderEliminarUn abrazo Amiga.
El despertar de la primavera hace florecer el amor, va pintando corazones y cuando la noche nace bajo su magia arden de pasión.
ResponderEliminarUn cálido abrazo
Medianoche, lindos colores adornan esa gran pasión de amor...y como no...de color rojo...¡Bello!
ResponderEliminarUn abrazo.
Tu poesía deja el corazón abierto a las imágenes que recreas en cada verso. Mi aplauso.
ResponderEliminarmariarosa
Imprégnate de ese maravilloso amor y vuela a las estrellas.
ResponderEliminarPrecioso...
Un abrazo
Dulce fiebre.
ResponderEliminarArdiente y sin cura alguna.
Besos.