AQUELLO QUE NO SE
Hace mucho tiempo que te busco
pero mi voz suena hueca,
mis palabras mueren precipitadas
en cada curva flotante de mis sueños,
te sigo en la espesa niebla de mis noches.
Si al encontrarte viera tu ojos solo una vez,
vería un amanecer fulgurante asediando me
entre el follaje de ese estero espacio,
pero no emites sonidos ni luz, y no te encuentro,
solo miro caer fosforescentes cristales que me ciegan.
Se que tu voz no puede nacer, esta atrapada allá,
entre miles de estrellas, junto a la estepa galáctica,
pero insisto en hacerte oír el susurro de mi amor,
la caricia de mis manos que apretadas tienen las tuyas,
porque no te veo, te tengo adherido a mis carnes.
A mi piel que te recuerda en la penumbra de tu voz,
en la ceniza de tu llanto forjado en el fuego de tu sangre,
entre magnolias perfumadas del paraíso donde te refugias,
no te conozco aún, pero tu grito mudo me asombra,
y voy en tu busca con la fuerza secreta de lo desconocido.
Los propios recuerdos a veces parecen desconocidos. Hermoso tu poema. Abrazos
ResponderEliminarUFFFFF, ME ENCANTA LA DETERMINACIÓN!!!
ResponderEliminarUN ABRAZO
Una fuerza que emana desde el oscuro espacio y se siente en el fondo del pecho, hermoso poema
ResponderEliminarsaludos
Un poema lleno de fuerza y luz!
ResponderEliminarMuy bello.
Cariños!
Rosario,tremendo y sugerente tu poema,nos habla de algo divino,que a todos nos atrae y nos llama desde el alma...
ResponderEliminarSomos esencia de Dios y lo buscamos por todas partes...
Mi felicitación y mi abrazo por tu inspiración y buen hacer,amiga.
M.Jesús