
Tú aroma respiro profundo me sacia los sentidos, me deshoja, me ciño a tu cuerpo de hombre tus caricias me sumergen en tu río. Soy como una hoja al viento mi llanuras sobre vuelas, tiemblas tiemblo, somos pequeñas criaturas que sueñan absolutas y eternas. En este lago de ensueños, de cielos las huellas se van formando de pasión, nos consume la llama del amor y es el soplo de viento quien nos da vida. Floreciendo bajo la luna en aromas, libres como el silencio que nos mece, libres para comenzar el vuelo estelar con el sonido murmurando del amanecer. MARÍA DEL ROSARIO ALESSANDRINI