Voy a escribir un verso puro que sude caricias de miel blanca, voy a tornear una canción de cuna De sentimientos huérfanos y ansias. Quiero ser una flor de almíbar, de grosella, sabor a menta negra voy a dejar un espacio para soñar Que tus besos no mueran sin besar. Este camino persigo con afán y bríos con sigilo lo voy desandando lento para verte entre mis flores dulces Cuando despunta el amanecer de luz. Cuando llegue a mi destino sentiré la miel, la menta y el fruto, un sueño un sendero brotado de azucenas, un jardín con tus ojos negro café. Estaremos disfrutando el momento sin dejarnos de sentir ni un segundo, bordaremos con besos muy sensuales Nuestra casa, el cuarto azul y su ventana. Así viviremos para siempre, sin mentiras olvidados del mundo que nos hiere, comprendiendo este amor aprueba desoyendo a los que nos maltrataron, esta muestra será cono un concierto. De bellas plumas blancas descendiendo al lugar que elegimos para amarnos, sin rozarnos con la burla y la mentira,...
Duros versos con un grito encerrado.
ResponderEliminarUn abrazo.
Cuando el amor sólo es un juego...El corazón se siente como una pelota rota...Un poema sencillo, profundo y emotivo.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo, Rosario.
Pese al dolor decepcionante que se transmite, es un texto que considero intenso y rítmico, uno de los que más me han gustado hasta ahora de los tuyos; quizás porque es breve, pero directo y con un compás muy armónico.
ResponderEliminarUm jogos sem vencedores que traz dor para a alma e grande frustração
ResponderEliminarBeijinhos e sorrisos, Querida
Irse solo y sin alma es muy duro pero...así son algunos, se lo merecen y lo peor es que se lamentan como si tuvieran razón.
ResponderEliminarUn abrazo.
Dejaste tristeza en tu poema, catarsis de algún momento especial.
ResponderEliminarmariarosa