ME DEJASTE IR
Me dejaste ir cuando brillaba, cuando mi juventud se estrechaba de ausencias en las noches, cuando los días cristalizaban mi agonía. Me dejaste ir cuando era flor primorosa cuando aún podía amar, cuando mi sentir junto a la belleza corrían parejas. Me dejaste ir sola, por ese sendero de espinas corriendo implacable tras tus huellas, me dejaste ir... Ahora en tu vivir buscas mi juventud pasada, esa ya no soy sólo queda hoy una imagen de ayer. Es mi madurez que te dice no cuando no encuentra las palabras sueltas, que me representen en aquel ayer donde me perdí.