no encajo en su vestimenta,
como si esperara el otoño triunfal
de aquellos tiempos de juventud.
Los sueños, y mi musa me olvida
vago en su búsqueda antigua,
perdiendo en el tiempo pétalos
de mi flor favorita, mis versos.
Sé que soy fuerte y voluntariosa
que lograre regresar a mi jardín,
donde las letras cuentan pimpollos
desencadenan palabras sin velos.
Triunfar es mi destino, lo presiento
como el roble que nunca se quiebra,
como los astros que son eternos
así regresara mi sueño, mi musa y la poesía.
ALESSANDRINI MARÍA DEL ROSARIO






