El otoño ha llegado
Se acercó muy despacio
Flameando sus bucles
Al compás de las hojas
Estremecidas de sueños.
Sus colores tan vivos
Nos despiertan y anuncian
Nuevas sensaciones,
Su pizarra se llena de brillos
Nos entrega sus ruidos.
Mi balcón expectante
Asimila su entrada amarilla,
Sus ojos de guirnaldas,
Su piel color de trigo,
Y en su pelo, flores secas
Adornando su breve estadía.
A-M-R




