
Tengo tanto amor para dar, espero por alguien
mi risa atraviesa ríos, mares, buscándote amor
sé que un día sin pensarlo sin buscarte llegaras
porque estás en mi sangre que te llama sin cesar.
Entiendo que la vida es como un gran viaje de luz
donde almas y cuerpos se entregan para ser iluminados,
para sentir la vida plenamente, así te espero con ansias
un día mi puerta se abrirá y tu paso cruzara presto.
Allí en ese mismo instante sabré reconocerte a tiempo,
podremos disfrutar ese encuentro esperado y deseado,
seremos dos almas al viento de este invierno descolorido,
seremos dos gotas de miel derramándose de dicha y placer.





