Entradas

UN AYER CALCINADO EN EL TIEMPO

Imagen
Una piedra más en el camino, humedad en los ojos, vacías esperanzas, y el alma secándose en la piel ausencia que me dejo tu desdén. Deseo te enteres de aquello que quiero, se que ya no te importa mi perdón, estas sordo, desvalido y ciego, tu desorden emocional me aturde, y tu nada percibes. Se murió aquel amor inmortal del que me hablabas, al prometer aquella noche brutal donde el amor se mostró infinito y bello. Tu maleta se lleno de hastió, y te alejaste por la cornisa del peligro sin mirar jamás a tu costado, donde tu amor derrapaba a tu paso dejando una huella imborrable. Explore el ayer desde mi tenue luz difusa, y vi, correr ese río de placer y de amor alocado. Las calles están llenan de imágenes, de suspiros, del misterioso encanto del amor total. Es posible que no te des cuenta. Tus recuerdos del ayer están en coma, no sé si podrás despertar algún día. Ráfagas intensas se detienen en mi iris colmando mis ojos del ayer, hombre de mis laberintos, ángel de mis noch

FLORES AMARILLAS

Imagen
Desahuciado el amor fenece, recita su final en la marisma azul desechando sus huéspedes. Hay flores que lucen amarillas como hojas desecadas, como ojos sin iris, quizás aún es tiempo de partir a un lugar desconocido. En el marco de un cuadro olvidado se puede morir más de una vez cuando florecen los cardos y se marchita la ilusión. Se puede oír el llanto de la noche decapitando las arterias de la luna un instante es una eternidad un monumento al olvido. Un sinfín de nombres que se cuelan abstractos en cada poro que humillado va dejando su esencia al final del sol en el comienzo de la noche fragmentada.

EXTERMINIO

Imagen
La cara de la verdad se extingue, se anula por ser destronada de su existencia. Hay un revés, un largo nudo que se cuela por kilómetros en las venas de la falacia erosionando al hombre inexperto. La lucha fecunda no se exterioriza, no prende, se va apagando entre la borrasca del mil colores falsos, deteriorado. La inconsciencia se dilata formando un largo camino al exterminio del noble, del honesto, del hombre cabal que no encuentra la esencia de aquel tiempo que hoy, no reconoce.

LUZ DE LUNA

Imagen
Atrapando lunas, cayendo entre las dunas veo crecer tu fuego. A pesar de estar lejos percibo tu existencia en los espacios nuestros. El éxtasis  se mece suave en azul del cielo que aún veo. Con mis versos te hablo, recorriendo tu alma. Va la luna corriendo muy de prisa, y mis ojos te ven, te acarician. Ya te estuve buscando en la colina de mis sueños nocturnos, de un hilo se prende mi esperanza es el mismo que nace de mi alma. Sin temor en tus brazos quiero ahora besar tu boca, amarrarte en la noche sobre mi pecho tibio, y degustar tus silencios en mi cuerpo que nace, en el tuyo que florece eterno entre los vientos de este hoy, del mañana... que apresura su canción de amor al besarnos con la luz de luna.

CANCIÓN DE CUNA EN EL RÍO

Imagen
Una mañana de enero dejé mi canoa libre para que descansen sus leños, no comprendí que mi niño quería salir en ella, y me fui cantando una nota descansada en mis latidos. Al llegar a la casa donde mis otros niños jugaban noté que Julio en mi mano ya no se sujetaba, regresé de prisa al río creyendo que estaba jugando en ese entorno tan bello. No encontré, ni al niño ni a la canoa y mis lágrimas asomaron. Un frío heló mi sangre, coaguló en mi su río. Corrí sola en la ribera gritando el nombre de mi hijo, pero nadie respondía y el agua se fue calmando. De pronto escuché un sonido que la brisa me traía, cantos, risas y jolgorios, sirenas nadando a prisa, vi como el río danzaba con sus gotitas de agua al costado de la barca. Muchos peces saltarines, una anguila, y las sirenas más bellas con sus colas largas aplaudían, juegos que unos delfines para mi niño mostraban. Danza la mujer del río, rompe los hechizos y mi llanto se aquieta, mi esperanza crece y mi voz se duerme,  colibríes  rosado

MUERO EN CADA GOTA DE RÍO

Imagen
Le pregunté a la luna que asomaba rellena de alegría, indagué en el cúmulo de estrellas, me desplacé con mi canoa en el río más hermoso y helado del planeta, te busqué en el follaje de la ribera. Mi premura es encontrarte hombre de mis noches y mis días. Sin saber porque escribo esta carta, continuo así, si desconozco tu  paradero.  Te fuiste un día cualquiera sin fecha,  sin nombre, sin mí, aún no puedo saber el porqué de tu partida. A la hora del crepúsculo te sueño mío solo mío... en mi lecho hablándome de amor, cociéndome a besos, quemándome con tu fuego voraz. Soy un jirón de mujer que aplastada gime noche y día, un pedazo de piel sin corazón que desvanecido en la oscuridad vacila entumecido. Gotitas derretidas de tu sonrisa adormece mis horas vacías. Grito tu nombre en medio de la tormenta más cruel y efímera,  pero mi voz se pierde entre la bruma. La solidez de tu abandono me dejo el dolor más intenso que jamás sentí. Ahora sólo pido a la noche un recuerdo de tu paso en mi

LUCERO TRASPARENTE

Imagen
El lucero suspiro una gota transparente sobre la blanca luna adormecida, ruborizó su piel dorada, y sus sueños despejaron el horizonte desnudando el romance celestino. Los collares estelares como un soplo eterno desertaron anunciando un nuevo día. La noche peregrina se perdió en el infinito y su imagen de hechicera navegó la enredada azul en otras galaxias. Recorre el sonido y se detiene en el aroma de los soles que gallardos pasean buscando lunas de plata mientras aletean mariposas estelares. Los versos no se repliegan, ni buscan refugiarse de la dama de la noche. Sólo se animan con una balada misteriosa y fecunda que la cortejaría en la lejanía. Hay duendes, hadas y corceles, y un puente celeste que al pisarlo se torna rosado… en él están las soldadas estrellas que en las noches firman el libro de la luz, y se pasean por el firmamento luciendo sus armoniosos destellos. El bálsamo seductor en los labios de la luna se desparrama en pequeñas gotitas multicolores abrazando el per